La guerra se suspendió oficialmente en 1991 cuando el Frente Polisario y el gobierno de Marruecos aceptaron el Plan de la ONU (Resolución 690) que incluye un alto el fuego, el intercambio de prisioneros, la repatriación de refugiados y la celebración del referéndum, todo bajo supervisión de la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental (MINURSO).

El general canadiense Armand Roy, Comandante de la unidad militar de la MINURSO, proclama el alto el fuego en el Sahara. En los campamentos de Tinduf, Mohamed Abdelaziz pone a la comunidad internacional por testigo del “compromiso saharaui para cumplir al pie de la letra el Plan de Paz“.