El auto del Juez de la Audiencia Nacional, Pablo Ruz, de fecha 9 de abril de 2015, en el que procesa a once altos cargos militares y policías marroquíes por genocidio en el Sahara Occidental, constituye un paso crucial en el reconocimiento de las violaciones a los derechos humanos cometidas por Marruecos en contra de la población saharaui. El magistrado considera probado que entre 1975 y 1991:
- “se produjo de una manera generalizada un ataque sistemático contra la población civil saharaui por parte de las fuerzas militares y policiales marroquíes”.
- “Concurren todos los requisitos del tipo penal que castiga el genocidio”.
- “Bombardeos contra campamentos de población civil, desplazamientos forzados, asesinatos, detenciones y desapariciones de personas, todas ellas de origen saharaui”.